El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, sigue activo, evoluciona de manera satisfactoria y atiende todos sus asuntos desde la clínica de Bogotá en la que el miércoles fue operado de un cáncer de próstata, dijeron hoy sus médicos. Santos, de 61 años, "se encuentra activo, con signos vitales estables y sin complicación alguna", subrayó el director médico de la Fundación Santa Fe de Bogotá (FSFB), Adolfo Llinás, en un nuevo parte sobre el estado de salud del gobernante.
El parte es el tercero que ofrece la FSFB, en donde el jefe del Estado ingresó el miércoles para una intervención en la que ee mismo día le fue extraído "un tumor limitado a la próstata". "Al cumplir su primer día postoperatorio (el presidente) continúa presentando una evolución satisfactoria", aseguró Llinás, responsable del equipo que, bajo el liderazgo del cirujano y urólogo Felipe Gómez, lo operó. La intervención, que tomó cerca de dos horas y media, fue realizada de manera exitosa, transcurrió sin contratiempos y lo que se halló era "concordante con los estudios preoperatorios". La recuperación del jefe del Estado también ha evolucionado de manera favorable, dentro de lo esperado, aunque "con las molestias propias del dolor controlado", como lo dijo también hoy el especialista Gómez, su médico tratante. Gómez coincidió con Llinás al expresar que, cumplido un día del procedimiento quirúrgico, "la evolución ha sido muy satisfactoria", hasta el extremo de que ya tolera la vía oral."De manera que si continuamos de esta forma, como parece ser, estaríamos dentro de lo esperado en el postoperatorio", dijo el urólogo, que fue quien le diagnosticó al gobernante el tumor canceroso y le recomendó que se sometiera a la intervención. El director médico del FSFB dijo que este proceso "ha seguido el curso normal esperado", pero al mismo tiempo aclaró que el plan de manejo previsto establece que Santos "continuará bajo cuidado hospitalario durante el día de hoy". Tanto Llinás como Gómez han mantenido que el presidente podría salir del hospital dos o tres días después de la operación y regresar a su residencia en la Casa de Nariño. Fue desde allí que Santos, en una alocución al país, reveló el pasado lunes por la noche que padecía un cáncer de próstata y que había acogido la recomendación médica de someterse al procedimiento quirúrgico. También por sugerencia de Gómez, el gobernante confirmó el 26 de septiembre último este diagnóstico y la conveniencia de la operación con un oncólogo y dos urólogos del Memorial Sloane Ketering Cancer Hospital, de Nueva York, adonde viajó para intervenir en la Asamblea General de la ONU. Los médicos también pronosticaron que, en condiciones normales, Santos estará en capacidad de reanudar sus desplazamientos en unas tres semanas y que deberá mantener controles periódicos. Entre los asuntos de mayor importancia en la agenda del gobernante están las negociaciones de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que comenzarán el 17 de octubre próximo en Oslo. La apertura del diálogo obedece al acuerdo que representantes del Ejecutivo y de las FARC firmaron el pasado 26 de agosto en La Habana tras seis meses de "conversaciones exploratorias". Santos habló de la próxima formalización del proceso con el alto comisionado para la Paz, Sergio Jaramillo, del equipo negociador gubernamental con quien se comunicó por teléfono el miércoles por la tarde, cuando empezó a retomar gradualmente sus actividades.El presidente se ha dedicado hoy a revisar documentos oficiales y a recibir llamadas y visitas de sus más cercanos colaboradores.En su última anotación en twitter, Santos escribió hace 22 horas: "Gracias a Dios todo salió bien y me estoy recuperando satisfactoriamente. Estamos muy agradecidos mi familia y yo por todo su apoyo". Informe 21